Descripción
De por si pensaba concluir estas reflexiones con la tercera parte. Sin embargo, más pasaba el tiempo y más veía la necesidad de añadir algún otro detalle. Por fin decidí añadir una cuarta parte. ¿Sera la ultima? Quien sabe.
En realidad, el tema se presta a todo tipo de reflexiones, volviéndose en un cuento de nunca acabar. Lo mismo se podría decir acerca del Derecho Canónico u otra asignatura, en su relación con la Palabra de Dios o la realidad eclesial, o las dos juntas. ¡Imagínense cuántas cosas habría que revisar en la praxis de nuestra Santa Madre Iglesia!
De hecho, una cosa es la doctrina y otra cosa es la vivencia de sus contenidos, no siempre suficientemente comprendidos y menos vividos, especialmente cando se vuelven en «costumbres», confundidas con la «tradición» y aceptadas sin reflexión alguna.